El derecho a la ciudad a través de la mecánica urbana
Reflexiones tras la primera lectura
Fernando Visedo Manzanares, arquitecto, amigo y compañero en la asociación de la Economía del Bien Común en Cádiz, me ha honrado con una primera lectura de su trabajo Entropía y entalpía urbana. El derecho a la ciudad a través de la mecánica urbana. Trabajo aún inédito e inacabado para una primera revisión. Este trabajo parte de uno previo como profesional del urbanismo por más de treinta años, y el desarrollo en el grupo local EBC Cádiz desde 2015 del proyecto Ciudad del Bien Común que ha intentado trasladar el enfoque, metodología y valores de la EBC al urbanismo.
He aquí unas primeras consideraciones y reflexiones inspiradas tras su primera lectura por alguien que durante más de treinta y seis años como técnico de administración local de la Diputación provincial de Cádiz ha tenido que bregar con el urbanismo y la ordenación del territorio en la provincia de Cádiz.
1.- Herramienta de trabajo para el urbanismo con valores
Este trabajo, que se extiende a lo largo de 471 páginas en seis apartados, es una herramienta de trabajo para urbanistas y políticos locales. Su carácter técnico aterriza los derechos humanos, que se compilan y reúnen en el concepto “derechos a la ciudad” de la población que vive en el territorio. Lo que no se conceptualiza no se puede medir, y lo que no se mide no se puede mejorar, decimos los evaluadores de las políticas públicas. Con este trabajo Fernando Visedo nos da la herramienta para hacerlo posible.
2.- Visión de la complejidad urbana que protagonizamos y vivimos como humanos
Las ciencias de la complejidad no han sido desarrolladas en casi ninguna de las artes científicas. Tan sólo meteorología, informática y biología. Por primera vez, según mi entender, hay una visión y análisis de las políticas urbanísticas desde su complejidad. Comienza por analizar la complejidad estática de la ciudad y su complejidad dinámica. Esta visión de la complejidad pone en el centro al ser humano social que vive, trabaja, interrelaciona social, cultural y políticamente sobre un territorio en el que impone su impronta e idiosincrasia por generaciones. No existe urbanismo sin el sujeto social que le da vida y razón de ser. Introduce así los derechos humanos en toda su amplitud como elemento esencial dentro del urbanismo. En este sentido el trabajo elaborado por Fernando Visedo es una enmienda a la totalidad del tradicional urbanismo que analiza por separado las dimensiones económicas, sociales e infraestructuras urbanas de forma estática e infravalorando la interrelación existente entre ellas.
3.- Es un trabajo multidisciplinar
En su prologo Fernando Visedo plantea que el trabajo compendia la visión matemática, jurídica y urbanística como enfoque de un trabajo multidisciplinar. Y es así para delimitar el desarrollo del propósito de su trabajo, para que este no se convierta en inacabable. En mi opinión, abre las puertas a una colaboración más amplia con otras disciplinas como la economía, informática, arqueología, botánica, y biología. Con esta última el propio Fernando Visedo en su Acápite del apartado seis “Genoma urbano” la incorpora, ofreciendo una innovadora metodología para medir y actuar sobre fenómenos nuevos como la turistificación o la gentrificación de los centros urbanos. Este enfoque multidisciplinar es el que permite unir la complejidad y el urbanismo con valores.
4.- Nodos, redes y flujos urbanos
En el apartado 4 Dinámica urbana analiza los vectores o nodos económico, social, ambiental y espacial. Estos cuatro nodos o vectores desarrollan redes y flujos generados entre ellos con los indicadores y algoritmos correspondientes que posibilita su medición, evaluación y adopción de las medidas oportunas. El entramado en forma de matriz/red configura un cuadro de mando para la gestión territorial. La base matemática de los doce flujos que se generan ofrece un soporte sobre el que programar el software de la ciudad inteligente (smartcity) integral. Las actuales, creadas por las grandes corporaciones privadas de la comunicación, sólo cuantifican datos inconexos.
5.- El tiempo incorporado al urbanismo
Consecuencia del análisis dinámico de los flujos que se dan dentro de la ciudad o área metropolitana, Fernando Visedo puede llegar a definir y concretar de manera evaluable dos conceptos que hasta ahora sólo se han utilizado de forma intuitiva: capacidad de desarrollo/crecimiento y capacidad de acogida de la ciudad. El tiempo se incorpora en toda su trascendencia dentro del análisis urbano apoyándose en la potencialidad no utilizada que contiene la ciudad o área metropolitana, aunque aún no se hayan manifestado. La ciudad se ve como un ente dotado de vida que nace, se desarrolla, madura y envejece; llegando a colapsar y morir. Y también esto puede llegarse a predecir y medir.
Incorpora también una forma de evaluar ex-ante y post las políticas públicas urbanas para comprobar si estas eran adecuadas o no, midiendo la aceptación de la ciudadanía a ellas y posibles efectos no buscados que hayan generado.
6.- De la ciudad resiliente a la ciudad regeneradora de vida
Fernando Visedo comienza con un apartado 1 sobre la complejidad urbana donde analiza de forma exhaustiva los diferentes indicadores existentes (Agenda urbana española, Urban Audit, ODS 11, ISO 37120, indicadores de evaluación ambiental, de cambio climático, etc) Podemos decir que son indicadores para la resiliencia urbana que despliegan una serie de objetivos individualizados para encarar los diferentes retos a los que nos enfrentamos en las ciudades y territorios por separado. Posteriormente se superponen unos con otros. No describen la complejidad urbana e imposibilitan conocer las verdaderas causas de la ciudad que es. Así define el objeto de su trabajo como el abordaje de una “planificación holística territorial y urbanística con un desarrollo equilibrado e integrado de los intereses sociales, económicos y espaciales, …, así como sus mutuas influencias y perturbaciones”. Parte del estado de la cuestión urbana para trascender y superarla con el enfoque universal de indicadores interconectados. Nos regala la herramienta que nos posibilita la posible regeneración de la Vida allí donde vivimos los humanos, en las ciudades y áreas metropolitanas.
7.- La Ciudad del Bien Común: co-creando el punto central de la EBC
Fernando Visedo desarrolla este trabajo como urbanista, al margen de la EBC, dirigido a técnicos y especialistas del urbanismo. Este trabajo deja aspectos recogidos en la Ciudad del Bien Común como es el vector/nodo político, desarrollando, hasta el punto de la definición de los algoritmos necesarios, los vectores/nodos económico, social, ambiental y espacial.
Debemos preguntarnos ¿En dónde se ubica la CBC dentro de la EBC? En 2010 de forma independiente y dual se plantea, a nivel global la Declaración universal del Bien Común de la humanidad, y por otra Christian Felber publica su libro la Economía del bien común dirigido a empresas privadas, que llega a ampliarse a los Municipios del Bien Común como administraciones públicas observadas como una empresa más de carácter público. Queda un hueco, que viene a ser ocupado por la Ciudad del Bien Común, entre lo global y la unidad de producción: la ciudad y áreas metropolitanas, donde actualmente vivimos más del 50% de la población mundial y se prevé que seamos el 70% en 2050. Ahí es donde se concreta la desigualdad, contaminación, especulación, dictadura, migraciones y guerras. Y también la creatividad, solidaridad, derechos, organización y participación democrática. Todas las luchas por el equilibrio y la armonía social y medioambiental se dan en las ciudades y áreas metropolitanas. Es en el territorio donde confluyen los retos y desafíos globales con el actuar y accionar de la humanidad. Es el aquí y el ahora. El que posibilita que haya políticas de abajo hacia arriba, que haya democracia, organización y lucha por nuestros derechos de ciudadanía. Protagonismo social y político desde la misma ciudadanía. La Ciudad del Bien Común es más que el Municipio del Bien Común. Son dos herramientas diferentes de la EBC, donde el protagonismo lo tiene el equipo de gobierno del ayuntamiento en el MBC, y la ciudadanía social en la CBC.
Fernando Moreno Bernal
Cádiz, a 07 de septiembre de 2023