Como podemos constatar fácilmente los medios de comunicación compaginan la información sobre la evolución de la pandemia con la información relativa a la economía.
Es evidente que la situación que estamos viviendo debe tener como prioridad una actitud cívica conjunta que permita erradicar lo antes posible esta invasión vírica, pero ello no debe ser óbice para que reflexionemos, quizás ahora más que nunca, tranquilamente, sobre el modelo económico vigente. Una vez más se verifica que los defensores de dicho modelo económico se presentan como víctimas de una crisis de la que son responsables, dado que son los autores-difusores de la estructura socio-educativa que ha convertido al dinero en Dios, el dinero por el dinero, en vez de utilizar el dinero como herramienta para el bienestar de la humanidad.
En estos días de reclusión en nuestras casas…para los que las tienen…me permito aconsejar, a los que no lo hayan hecho, la lectura de este documento que escribí en 2013 sobre el Sistema Financiero español. Lo podéis pinchando a continuación, es un PDF gratuitamente descargable y creo que, a pesar de haber sido escrito hace siete años, permite comprender el entramado organizativo de un modelo económico que nos está llevando a una catástrofe mundial.
Descargar “El sistema financiero español”
Al final de dicho documentó incluí el manifiesto “Yo acuso”, que leí en el programa de RNE “No es un día cualquiera” ante la situación generada por la crisis económica. Me reitero en muchos de los propósitos que expresé en el mismo.
No quiero terminar estas líneas sin hacer referencia a los economistas que defienden el modelo liberal-capitalista y en particular al argumento de “la mano invisible” que, al parecer, resuelve todos los problemas relacionados con el comportamiento de los mercados financieros. Como ocurrió en la crisis llamada financiera, que se inició en 2008, con la crisis de la gripe aviar, con la crisis de las vacas locas, con la crisis del Ébola…etc, son los gobiernos, con dinero público, los llamados a resolver el problema…¿Es esa “la mano invisible”?…
Es patético escuchar estos días a dichos economistas en medios de comunicación españoles, franceses y anglosajones, reclamando intervenciones urgentes de los gobiernos, repito, con dinero público.
¡Vivir para ver!
Buenas noches, buena suerte, salud y Bien Común
Paco Álvarez